Mecánico de aviación, piloto de feria, aviador famoso, actor, y finalmente terrateniente, la vida de Douglas G. Corrigan puede calificarse de cualquier cosa menos de aburrida.
Su momento de gloria llegó en 1938, cuando sin ninguna autorización y con un avión sin certificar, voló de Nueva York a Dublín en solitario, según él, debido a un "error" de navegación. Sólo la valentía de su hazaña, el buen humor de un público inmerso en la Gran Depresión (que le bautizó como "wrong way Corrigan") y su naturalidad, le salvaron de la inhabilitación o incluso de la cárcel.
|